Blogia

Agustín Villanueva

SOCIALIZAR LAS MENTES

En relación con la verdad objetiva de conciencia encuentra su justificación como condición necesaria para la búsqueda de la verdad digna del hombre y para la adhesión a la misma cuando ha sido adecuadamente conocida. Esto implica a su vez que todos deben respetar la conciencia de cada uno y no tratar de imponer a nadie la propia verdad respetando el derecho de procesarla, y sin despreciar por ello a quien piensa de modo diverso. La verdad no se impone sino en virtud de sí misma. Sólo con el cristianismo se separa la Iglesia del Estado, y esa fue su crucial a portación a la idea de la libertad y la razón por lo que la historia de la libertad es en gran medida la historia de la religión. La verdad no debe temer la confrontación, y ni la ciencia ni la razón tienen porque ser contrarias a la fe. Todo lo contrario, sirven a los verdaderos fines de la iglesia, una iglesia que debe ser autónoma e internacional. Rafael Termes indicaba que, frente a la estatalización del intelecto, la primera prioridad de la defensa de la sociedad abierta es proceder a la privatización de las mentes. Por ello es más decisivo privatizar las escuelas y las universidades que sacar al mercado un organismo autónomo o un monopolio estatal.

Los poderes públicos consideran el proceso estatalización de la enseñanza como una especie de campo de experimentación como una especie de experimentación y se resiste a devolver el protagonismo a los padres y a la sociedad civil. Jean Pierre Chevénement decía que no basta con cambiar las cabezas, hay que cambiar también lo que hay dentro de las cabezas, y eso ya es una pasada.

    En la declaración Gravissimun Cristiana se manifiesta que todos los hombres, de cualquier raza, condición social y edad, en cuanto a participante de la dignidad de la persona tiene el derecho inalienable de una educación, que corresponda al propio fin, al propio carácter, al propio carácter.  Entre todos los medios de educación, el de mayor importancia es la escuela, que, en virtud de su misión, a la vez que cultiva con asiduo cuidado las facultades intelectuales, desarrolla la capacidad del recto juicio, introduce en el patrimonio de la cultura conquistado por las pasadas generaciones, promueve el sentido de los valores, prepara a la vida profesional, fomenta el trato amistoso entre los alumnos de diversa índole y condición, contribuyendo a la mutua comprensión. Además, constituye como un centro de cuya laboriosidad y de cuyos beneficios debe participar a un tiempo las familias, los maestros, las diversas asociaciones que promueven la vida cultural, civica y religiosa, la sociedad civil y toda la comunidad humana. Es preciso que los padres, cuya primer e intransferible obligación y derecho es educar a los hijos, tenga absoluta libertad en la elección de las escuelas. El dicho de que el paga manda vale para todos menos para la educación, dado que los padres, verdaderos educadores, no tienen la verdadera libertad de elegir y de experimentar.

 El poder público, a quien pertenece proteger y defender la libertad de los ciudadanos, atendiendo a la justicia distributiva, debe procurar distribuir las ayudas públicas de forma que los padres puedan escoger con libertad absoluta, su propia conciencia, las escuelas para sus hijos. Hoy, más del 75% de los padres quieren religión en las escuelas para sus hijos y que la religión reciba el mismo tratamiento curricular que el resto de las asignaturas. Si nos atenemos a los derechos es evidente que si no se hace así, se estarían vulnerando los siguientes derechos: la Constitución española en su artículo 27.3 dice que los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones. La Declaración Universal de los Derechos Humanos en su art. 18, dice que  toda persona tiene derecho de manifestar su religión o su creencia individual y colectivamente, tanto en público como en privado, por la enseñanza, la práctica, el culto y la observancia, los padres tendrán preferente a escoger el tipo de educación que habrá darse a sus hijos. El Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales señala que los Estados se comprometen a respetar las libertades de los padres de escoger para sus hijos escuelas distintas a las creadas por las autoridades públicas. La Ley Orgánica de la Libertad Religiosa prescribe que la libertad religiosa y de culto garantizada por la Constitución comprende el derecho de toda persona a recibir e impartir enseñanza e información religiosa de toda índole.

Nuestros gobiernos quiere tolerar la enseñanza de la religión, pero negándole la índole evaluable y sin alternativa curricular. Se pretende, por parte del Estado invadir nuestras vidas, nuestras escuelas, nuestra muerte, nuestra forma de familia, o sea de la cuna a la tumba, y por ende estatalizar nuestro pensamiento.

Los ejemplos de esta pasada Navidad son múltiples, pero no nos quisieron decir que los Reyes abandonaron todo por buscar al Niño Dios, y salir de nuestras clausuras y reconocer el esplendor de la luz que ilumina nuestras vidas. Esa luz que es Cristo, es la luz con la que brilla la Iglesia. Lo que demos de tener claro, es que el carnaval de la Navidad, es que lo que están haciendo es la gran Parada del Orgullo Multicultural. Nada de lo que está ocurriendo es inocente. Pero donde están los católicos y los cristianos?

 

                                                Agustín Villanueva

                                           Profesor Doctor de la UMH

                                                2016 / 01 / 12

MENTIRAS, VERDADES Y FALACIAS POLITICAS

               MENTIRAS, VERDADES Y FALACIAS POLITICAS

 

    En un dialogo entre Kart Popper, Mario Vargas Llosa y Pedro Schwartz, sale el tema de la mentira ante una pregunta de Schawrtz a Popper, al decirle si Mario Vargas le hubiese preguntado antes de la campaña electoral si le aconsejaba mentir o no mentir, ¿qué le habría dicho? La respuesta de Popper fue inmediata: sólo los estúpidos mienten. Aparte de que por supuesto la mentira es inmoral, los que mienten creen que son más listos que los demás, que llevan por mentir la delantera a los demás. Y esa creencia en su superioridad es señal de estupidez. En la Sociedad Abierta, Popper menciona el incidente de la carta de Zinoviev: una campaña electoral británica fue ganada, en parte, por el apoyo de una carta del soviético Zinoviev al Partido Laborista. Y la carta resultó ser falsa. En ese caso, Popper dijo que probablemente habría sido necesario repetir las elecciones. Que se deberían hacer reformas institucionales para que se garantizase la limpieza de las campañas. Este año los que votan no van a parar de hacerlo.

    Hoy si analizamos a una gran mayoría de nuestros políticos se podría escribir un magnifico manual (bueno, por lo menos sería muy útil para mis alumnos, tan buenos e inocentes ellos). Una cosa es cambiar de opinión y otra es la mentiras, realmente no hay comparación; entre el error voluntario y el engaño deliberado se despliegan numerosas variedades de híbridos en que ambos se mezclan según todas las dosificaciones posibles. Veamos algunos titulares en los medios de comunicación:  “El reparto de inversiones según el PIB sólo favorecería a Cataluña, Andalucía y Baleares ;  “ Que se vaya a la mierda la puta España”; “La tiniebla envuelve todavía el verdadero alcance de lo pactado, con el consiguiente quebranto del parlamentarismo “, “Quien nos ataca, ataca al Gobierno”; “No se puede tolerar el intento de humillación y de desprecio por el nuevo CGPJ”, Rajoy “cumple con lo prometido”.... Y los titulares de Bentham serían: “Destruidnos, y habreis destruido al Gobierno mismo”; “Convertidnos en objeto de desprecio, y habréis hecho despreciable al Gobierno”; “Alguien ha de pasar por infame”,.. Mi opinión de la actual situación de nuestro país, es como la secuencia en un restaurante en la que un comensal pide de comida un pato salvaje, pero el camarero  queriendo no decirle que no había, le dice que pato salvaje no tiene, pero si quiere le puede cabrear una gallina.

    Un amigo, profesor él, recientemente me decía que  la verdad no es posible en política y que en el caso de Zapatero  y Rajoy, lo curioso es que sus verdades se parecen mucho al talante angelical y transparente que han escogido representar, con el fin de realizar, como todo el mundo, sus verdaderas intenciones.  Magnifico caro amico, te ha quedado de miedo. Creo que después de esta afirmación te mereces un puesto, por lo menos, de vocal en el “nuevo” CGPJ. Una vez más se repite aquello de  todos al suelo que vienen los míos.

    En la “Mentira simple”, Revel decía que la ideología y la mala fe son soluciones complejas, costosas en energía, en tiempo y hasta en inteligencia. Su empleo no se justifica más que en caso de fracaso de la mentira pura. Ese fracaso, además, es mucho menos frecuente  de los que insinúan los adeptos de las sutilezas superfluas; ninguna mentira podría imponerse, de manera duradera, en las ciencias exactas. Pueden engañar algún tiempo a la comunidad científica (por ejemplo, “investigadores impacientes”), pero dependen en última instancia de sicopatología. La mentira simple, voluntaria, conscientemente empleada como medio de acción, es una práctica corriente en la esfera política, ya emane de los Estados, de los partidos, de los sindicatos, de las administraciones públicas o de otros centros de poder. La profanación de las palabras es uno de los recursos habituales, se llama una realidad con una expresión que quiere decir otra cosa, y el oyente o el lector inadvertido acepta la falsedad sin darse cuenta; o por cuestiones ideológicas, trata de no darse cuenta. Los persas de Herodoto pensaban que todo el mundo se equivoca menos ellos.

    En un magnifico artículo de Julián Marías, otro de mis grandes maestros, que lo titulaba “La verdad os hará libres”, afirmaba que si cada mentira tuviera la respuesta fácil y elemental de su confrontación con los hechos, quedaría inmediatamente desvirtuada, sería inoperante y nada peligrosa. Pero no se hace sino muy excepcionalmente. Cada día en los períodicos, en los coloquios,... se pueden contar mentiras evidentes, flagrantes, a las cuales no se pone coto ni rectificación. El problema es que las mentiras se pueden ir acumulando. Y ocurre que la mentira es fácil de descubrir y mostrar, basta con enfrentarla  con la verdad, con decir lo que ha ocurrido y ocurre, con ver la tergiversación o la ocultación de la realidad. Hay personas que cuando abren la boca – salvo para ingerir alimentos – mienten sistemáticamente.

 

 

 

                                         Agustín Villanueva

                                         Profesor de Economía Aplicada de la UMH

 

                                                   2015 / 02 / 17

ES LA POLITICA NO LA ECONOMIA

                                EDITORIAL DE COLOQUIOS EN LIBERTAD

                       

                        

                         ES LA POLITICA NO LA ECONOMIA

 

   El 23 de enero del 2008 escribía yo un artículo con este mismo título. Ortega manifestaba que estamos gobernados, desde hace ocho años, por una comunidad de cuya totalidad ignoramos que pensamiento tiene, por un gobierno sin ideas políticas, sin conciencia política. En cuanto a los ministros tomados individualmente nos consta que algunos de ellos no piensan ni han pensado nunca nada. Nos dirigen políticos ahora de los cuales no podemos, aunque quisiéramos, ejercitar la virtud del respeto. Platón quería que gobernasen los filósofos, no pidamos tanto, reduzcamos al mínimo común nuestro deseo. Pidamos que no nos gobiernen analfabetos. Y aún peor que los analfabetos intelectuales son los que a la vez practican el analfabetismo moral. La esclerosis intelectual y la ceguera ante los finen acechan a todos, o a una gran mayoría, a todos los políticos.

    Lamento citar a Paul Krugman, vendedor de libros, pero decía que hay dos tipos de economistas, los profesores y los vendedores de políticas económicas. Los políticos casi siempre prefieren a los segundos. Los profesores, según los políticos, no tienen incapacidad para comunicarse, sino incapacidad para decir a los políticos lo que quieren, necesitan, oír. Sobre todo cuando están tratando de arrebatar el poder a otro político. ¿Qué es un vendedor de política económica? Es un tipo distinto del intelectual. El vendedor sólo escribe y habla para una audiencia amplia, ofrecen respuestas fáciles. Son extraordinariamente útiles. La relación se da entre los economistas y los políticos sobre los intentos de los políticos de encontrar economistas que tengan ideas que puedan empaquetarse y sobre la manera en que los economistas conciben ideas y tratan de traducirlas en influencia política. Un día Pedro J., otra víctima del sistema, le pregunta a ZP: ¿No tenemos un escenario de crisis económica por delante? A lo que ZP contesto, En absoluto, eso es una falacia, puro catastrofismo.

    Bien ZP, bien Rajoy. La teoría debe ser, lo mejor para llegar a ningún sitio es echar a andar hacia allí, en vez de intentar alcanzarlo de un salto y darse de narices.

    En el debate de hoy, aparte del tema del Editorial, me gustaría de hablar de Consenso que fortalece la Democracia (caso UPYD, PP Y PSOE y los nacionalistas). Del soberanismo en cuanto puede ser la mayor amenaza para la economía),  La entrega de balas y pistolitas, y del Estado de la Nación.

 

                                                   Agustín Villanueva

 

                                         DIRECTOS DE “COLOQUIOS EN LIBERTAD”

         

                                                 esRadio 107.4 o 107.2

 

                                                          2014/02/27

Liberalismo o un nuevo Liberalismo

                          LIBERALISMO O UN NUEVO LIBERALISMO

 

     El liberalismo es el sistema que se fija por objetivo el dar al mayor número posible de gentes el mayor número de posibilidades para que ellos mismos elijan su propio modo de vida. Liberalismo quiere decir capitalismo y mercado y nada más; quiere decir libertad económica y política, propiedad privada e imperio de la ley. Sin embargo neoliberal es el pariente pobre del liberal.

 La exVicepresidenta del Reino de España, hace un tiempo, sentó cátedra en Latinoamérica, a través de importantes parlamentos en distintos países. Después de las “ordenes” que había dado a la justicia, nos deleitó sobre un nuevo concepto del liberalismo, mejor que no cite al “estatalista” Rubalcaba, hoy me he levantado “sano”. En la “maravillosa” capital Brasilia, construida después de arrasar todo lo que se encontraba de por medio, nos dijo que la culpa del cambio climático la tiene la concepción “depredadora” del neoliberalismo económico imperante durante las últimas décadas, “una base construida sobre el individualismo extremo (debe ser mucho mejor el colectivismo extremo), el egoísmo y la irresponsabilidad elevadas a la categoría de virtudes sociales económicas; el liberalismo para la exVice tiene “una mirada insaciable a la que el planeta le parece insignificante”. Creo que por esas ideas se ha cambiado su “rostro”

    Liberalismo, cara exministra del Reino de España (como dice el anuncio: mi casa es la republica independiente) quiere decir capitalismo y mercado y nada más. Como manifiesta Hayek, hay una trinidad inseparable de la civilización: la legalidad, la libertad y la propiedad; y esos son los pilares que sostienen la filosofía liberal. El expresidente del Reino de España, ZP y el actual Presidente Rajoy al principio de su mandato también hablaban de liberalismo, por suerte para los españoles ya no esta en el gobierno, pero tampoco en los Tribunales y nos dejo a Rubalcaba y a Rajoy. Por eso Vargas Llosa decía que hoy todos somos liberales, lo que equivale a: nadie es liberal. A lo mejor la exVice nos quiso hablar de un liberalismo aristocrático, de un liberalismo extremo, de un liberalismo de caviar o de un liberalismo malgré lui. La liberad es toda ausencia de coacción (hasta con los 400 euros y la corrupcion, utilizan la coacción) arbitraria o de obstáculos para la acción que permite gozar pacíficamente de la independencia privada; ningún poder humano dictará la conducta de un hombre libre No me hablen de “ayudas” (6 millones de parados), hábleme de crear trabajo; eso es lo social. Espero que Rajoy deje de ser socialdemócrata. Más mercado y menos impuestos. Para amar la libertad y la tolerancia no es preciso destruir la verdad.

    Un autor liberal diría  que el liberalismo se halla tan lejos del intervencionismo de marchamo progresista como del conservadurismo. El primero reprocha al liberalismo clásico ser una filosofía política conservadora en cuanto se opone a una filosofía de la historia que considera al Estado como el realizador de la idea de progreso. El segundo reprocha al liberalismo, especialmente a sus posiciones individualistas y antiestatalistas, el haber fomentado el proceso de decadencia y disolución de la comunidad política llamada Estado. El fin del orden político es la libertad: para el verdadero liberal, la libertad es siempre un fin, nunca  un medio. La política es filosofía en acción. La conducta ética exige coherencia con los propios principios. No se puede tener un gobierno, como bien decía en un brillante artículo el profesor Asencio, en que pretende prohibirlo todo. Eso si, hasta quiere prohibir la creación de empleo. El mejor criterio para juzgar si un país es realmente libre es el grado de seguridad de que gozan las minorías.

    El profesor Ralf Dahrendorf manifestaba que la democracia es una forma de vida, y que hay dos condiciones fundamentales de la misma y que forman parte del núcleo más propio del orden liberal: la sociedad civil (¿Dónde está, donde se encuentra?) y el imperio de la ley. La sociedad civil es la sociedad de las asociaciones, de las agrupaciones libres de personas. Los vínculos creados por las asociaciones constituyen el mundo de la vida; su existencia hace que el estado, la política, no sea lo único realmente importantes; si la democracia carece de la sociedad civil, o no tiene raigambre o se le exige demasiadas cosas.

    El imperio de la ley, es otro de los presupuestos del orden liberal, y su complejidad no es menor que la de la sociedad civil. Donde falla la democracia, la rule of law representa una retaguardia absolutamente indispensable. El Estado nacional y la democracia parlamentaria de corte clásico sigue siendo la columna vertebral del orden de la libertad. Si no hay confianza, el mejor sistema jurídico no sirve de nada; pero el mundo anómico no fomenta precisamente la confianza.  El profesor Neira, nos decía que España no ha tenido nunca una democracia real, sino un régimen parlamentario, que es muy distinto. Polibio advertía: el nombre más bello de todos es la  libertad y democracia, pero la denominación de la realidad será lo peor, la demagogia.

    En volver al mundo real, el liberalismo significa afirmar la libertad, los derechos fundamentales, la dignidad del ser humano, la democracia, la igualdad de oportunidades. Pero también significa aceptar y afirmar la autoridad, la seguridad, la ley y el orden, el individualismo, la economía de mercado, la propiedad privada, la gestión de los intereses, el egoísmo, el afán de lucro, un cierto grado de desigualdad. Durante 8 años estamos viviendo la “tentación” estatal. Es nada bueno creerse que uno es el centro del mundo y que todo sucede por indicación suya. Ya decía Dante, no hay mayor dolor que recordar el tiempo feliz en la miseria.

 

                                                     Agustin Villanueva

                                                     Profesor Honorífico de Economía Aplicada UMH

                                                     

                                                               2014 / 02 / 06

                                                             

 

 

 

 

 

EL DELITO DE INFORMAR

                                 EL DELITO DE INFORMAR

 

 No hace mucho tiempo F. Álvarez escribió un artículo en el que afirmaba que escribir es llorar. Yo diría más, que informar, en general, se puede convertir en un delito. El mundo actual se divide, según  Revel, en países donde el gobierno quiere sustituir a la prensa y países en que la prensa quiere sustituir al gobierno. La enfermedad de los primeros sólo puede curarse en virtud de un único remedio: la democracia, o un principio de libertad. A curación de los segundos, los que ya son democráticos, están en manos de la misma persona. Ya sería hora de que todos los periodistas, y no solo un puñado de ellos, se decidieran a hacer, por fin, plenamente, su único oficio verdadero: dar informaciones exactas y completas, y a continuación todas las opiniones , análisis, exhortaciones y recomendaciones que quieran, a condición de que se fundamenten en esas mismas informaciones exactas y completas. No envenenemos nosotros mismos las fuentes de donde fluye el agua que bebemos.

    El que fue gran periodista y padre de varias promociones de periodistas, Luka Brajnovic, nos decía que la democracia concebida como una manera de ser contraria a las dictaduras y a las anarquías, no consiste en la mezcla de verdades y mentiras, de ideales y demagogias, de salud moral y podredumbre, de la franca convivencia social y la hipocresía de una burguesía ya momificada de libertad y desorden, de pacifismo y violencia, de civismo ciudadano y lucha de clases; sino un sincero respeto a la persona humana y a sus derechos, a la libertad individual y asociativa y a la vida digna. Es pon tanto completa y esencialmente distinta a la libertad de expresión de la libertad de dañar o esclavizar a los demás. La primera es un derecho, la otra un delito.

    Un periódico no debe ser un poder político, es el poder de la verdad Un redactor del periódico The Steamboat Pilot escribía sobre las “criticas del público”: Si escribo un análisis en profundidad, es demasiado largo. Si lo hago condensado, es incompleto. Si tomo partido en un tema, tengo perjuicios. Si no, soy un cobarde. Si no me paro a charlar soy demasiado grande para mis zapatos. Si me paro a charlar, no tengo mucho que hacer. Si acepto una invitación social, soy un alcohólico. Si no lo acepto, soy un bicho raro e introvertido. Si cito mal su nombre, usted no lo olvidará nunca. Si lo cito bien, usted no leyó mi artículo. ¿En qué consiste el oficio de un periodista?

    Mientras el hombre milite en el periodismo como afirma J.Hohenberg, las marcas distintivas de su valor como profesional serán: su responsabilidad y su criterio; su educación, sus antecedentes y su adiestramiento; su capacidad técnica como reportero, escritor o editor. Y su contribución hacia el progreso de las normas y la ética profesional. El hombre puede cambiar la práctica, los principios no. Sería muy malo cuando un periodista invoca el “derecho a informar”, el “derecho a la información” se refiere a su propio derecho de presentar los hechos como a él le guste, casi nunca el derecho del público a ser informado con exactitud y sinceridad. Quiero dar gracias al mundo de la comunicación por permitirme alcanzar, en el mes de febrero, mis 50 años de mi “nacimiento” en todos los medios de comunicación.

 

                                                     AGUSTÍN VILLANUEVA

                                               Profesor de Economía Aplicada de la UMH

                                                              2014 / 01 / 31

LA POLITICA Y LOS NACIONALISMOS

 LA POLITICA Y LOS NACIONALISMOS

                                          

 

                                              MIRE LOS MUROS DE LA PATRIA MIA

                                             SI UN TIEMPO FUERTES, YA DESMORONADOS,

                                             POR LA CARRERA DE LA EDAD CANSADOS,

                                             POR QUIEN CADUCA YA SU VALENTIA. QUEVEDO

    La alternativa a izquierda y derecha suele ser populismo, Norberto Bobbio decía que sobre la izquierda prima la igualdad y sobre la derecha prima la libertad. Hoy en día ni izquierdas ni derechas son ideología. Cada época desarrolla sus programas políticos en función de sus propias circunstancias. En el caso del PP actual lleva una política socialdemócrata, y en temas de impuestos ha superado por la izquierda a IU.

    Hoy en día uno de los problemas más graves en España son los nacionalismos tanto catalán como vasco. Y se han visto mas agravados por la falta de autoridad de los gobiernos de Zapatero y de Rajoy, y en su incumplimiento de la Constitución que ellos juraron cumplir. Julián Marías manifestaba que hablar de un estado compuesto por varias “naciones” no tiene ningún sentido, si acaso sucede lo contrario: una nación integrada por varios estados. No puede haber “imperium in imperio”.

   “Autonomía nos es soberanía”, como dice el Tribunal Constitucional, sino que es un poder limitado en el que cada organización territorial es “una parte del todo”. La autonomía sólo tiene sentido dentro de la unidad y así debe interpretarse el básico artículo segundo de la Constitución: La constitución es fundamental en la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas. El señor Rajoy no debió llegar al artículo segundo, y en política se aparto de su partido conservador de derechas. Alguien decía que mejor es no ver y darse cuenta de nada que ver y darse cuenta y no ir más allá de la visión.

   En un artículo el profesor Benigno Pendás decía: ¡Cuántos males se derivan del romanticismo trasladado a la política! Hay quienes todavía pretenden sublimar a la comunidad en perjuicio del individuo y de su libertad. La civilización liberal se compone de individuos, que la sociedad vertebra a través del contrato y no del estatus. ¿Cómo pueden los nacionalismos considerarse modernos y pensar que los demás rechazamos la libertad?

   España, como decía un aliado musulmán del Cid en la conquista de Valencia, ¡Qué gran nación si hubiera buenos políticos!, Es claro que en la política no pueden estar ni los sabios ni los dioses.

 

                                              Agustín Villanueva

                                          Profesor de Economía Aplicada de la UMH

                                                       2013 / 01 /14

 

             

   

        QUIENES DEBEN GOBERNAR DESPUES DE LA CATASTROFE Nacional

                          

     En el Colegio San Narciso de Marín un profesor me dijo que definiera el concepto historia. Le dije es la sucesión, sucesiva, sucedida, sucesivamente. O sea, la historia de esta Nación es casi siempre lo mismo. Somos una Nación idílica que nunca pasa nada: juego sucio contra la democracia, corrupción política, corrupción sindical, nacionalismos, deterioro educativo, no división de poderes, etc. Mala suerte para la nación atrapada todavía en un bucle pernicioso y al que aún le queda probar el estado de ingobernabilidad. PRONTO.

    El 1 de marzo 1900, nos cuenta Joaquín Costa que  se constituye la Unión Nacional, por muy poco tiempo, pero el movimiento habría de suscitar un sinfín de esperanzas e ilusiones. Era el gran  partido renovador y también revolucionario, que debía instar el cambio político. El año anterior Villaverde plantea su reforma tributaria que generaría una amplia masa de descontentos: simplemente, los que habían de pagar más. Comerciantes e industriales pequeños y medios se incorporan a la Unión Nacional que trata de influir en el Gobierno mediante distintos tipos de acciones. Entre ellas, la huelga de los contribuyentes, que, como es lógico, habría de fracasar.

    Fracasada esta experiencia, tentará Costa la vía de la Unión Republicana de Salmerón. La Patria necesita una revolución, tiene que mudar de piel, romper los moldes viejos que Europa rompió hace ya más de un siglo, sufrir una transformación honda y radical de todo su modo de ser político, social y administrativo, acomodar el tipo de organización a su estado de atraso económico e intelectual y tomarlo nada más como punto de partida, con la vista en el ideal europeo. Esa revolución implica, según Costa, y demanda de gobernantes y de gobernados estas cinco cosas: Promover el enriquecimiento del país y la baratura de la vida; Abaratar la Patria, simplificando la organización administrativa, que es demasiado complicada; pagar a las clases desvalidas y menesterosas; Afianzar la libertad de los ciudadanos y extirpando el caciquismo..

  Hace falta averiguar es quiénes deben presidir la Nación y porque camino deben llegar. Por los mismos partidos reinantes, adoctrinados por la catástrofe y arrepentidos de su conducta pasada. Por hombres y partidos nuevos que suplan la falta de preparación, de voluntad o de fortuna de los del turno y que lleguen al poder, sin necesidad de ningún movimiento de abajo, por acción reflexiva y personal del poder moderador. O por hombres y partidos nuevos también, llegados al Poder mediante una revolución adjetiva, o digamos de abajo, sea activa o pasiva.

    Hicieron quebrar a la nación, han probado que no tenían arte para rehabilitarla y se niegan a retirarse. ¡Ha llegado la hora de que volvamos por nosotros mismos, expidiéndoles la licencia absoluta, y que, si resisten, los declararemos enemigos públicos! Se ha colmado la medida de nuestro sufrimiento.

 

                                                 AGUSTIN  VILLANUEVA

                                   Profesor de Economía Aplicada de la UMH

                                                     2013 / 12 / 10 

 

Meniras, Vedades, y Falacas Políticas

               MENTIRAS, VERDADES Y FALACIAS POLITICAS

 

    En un dialogo entre Kart Popper, Mario Vargas Llosa y Pedro Schwartz, sale el tema de la mentira ante una pregunta de Schawrtz a Popper, al decirle si Mario Vargas le hubiese preguntado antes de la campaña electoral si le aconsejaba mentir o no mentir, ¿qué le habría dicho? La respuesta de Popper fue inmediata: sólo los estúpidos mienten. Aparte de que por supuesto la mentira es inmoral, los que mienten creen que son más listos que los demás, que llevan por mentir la delantera a los demás. Y esa creencia en su superioridad es señal de estupidez. En la Sociedad Abierta, Popper menciona el incidente de la carta de Zinoviev: una campaña electoral británica fue ganada, en parte, por el apoyo de una carta del soviético Zinoviev al Partido Laborista. Y la carta resultó ser falsa. En ese caso, Popper dijo que probablemente habría sido necesario repetir las elecciones. Que se deberían hacer reformas institucionales para que se garantizase la limpieza de las campañas.

    Hoy si analizamos a una gran mayoría de nuestros políticos se podría escribir un magnifico manual (bueno, por lo menos sería muy útil para mis alumnos de Ciencias Políticas, tan buenos e inocentes ellos). Una cosa es cambiar de opinión y otra es la mentiras, realmente no hay comparación; entre el error voluntario y el engaño deliberado se despliegan numerosas variedades de híbridos en que ambos se mezclan según todas las dosificaciones posibles. Veamos algunos titulares en los medios de comunicación: “España vive su momento de más unidad”; “El pacto incluye una cláusula que limita la solidaridad de Cataluña con el resto de regiones”; “El reparto de inversiones según el PIB sólo favorecería a Cataluña, Madrid, Baleares y Valencia”;  “ Que se vaya a la mierda la puta España”; “La tiniebla envuelve todavía el verdadero alcance de lo pactado, con el consiguiente quebranto del parlamentarismo “Zapatero niega que dijera que aceptaría el Estatuto sin cambios”, “Quien nos ataca, ataca al Gobierno”; “No se puede tolerar el intento de humillación y de desprecio por el nuevo CGPJ”, Rajoy “cumple con lo prometido”.... Y los titulares de Bentham serían: “Destruidnos, y habreis destruido al Gobierno mismo”; “Convertidnos en objeto de desprecio, y habréis hecho despreciable al Gobierno”; “Alguien ha de pasar por infame”,.. Mi opinión de la actual situación de nuestro país, es como la secuencia en un restaurante en la que un comensal pide de comida un pato salvaje, pero el camarero  queriendo no decirle que no había, le dice que pato salvaje no tiene, pero si quiere le puede cabrear una gallina.

    Un amigo, profesor él, recientemente me decía que  la verdad no es posible en política y que en el caso de Zapatero vuelve Zapatero, ¡vuelve el PSOE! (templad malditos, templad) y Rajoy, lo curioso es que sus verdades se parecen mucho al talante angelical y transparente que han escogido representar, con el fin de realizar, como todo el mundo, sus verdaderas intenciones.  Magnifico caro amico, te ha quedado de miedo. Creo que después de esta afirmación te mereces un puesto, por lo menos, de vocal en el “nuevo” CGPJ. Una vez más se repite aquello de  todos al suelo que vienen los míos.

    En la “Mentira simple” Revel decía que la ideología y la mala fe son soluciones complejas, costosas en energía, en tiempo y hasta en inteligencia. Su empleo no se justifica más que en caso de fracaso de la mentira pura. Ese fracaso, además, es mucho menos frecuente  de los que insinúan los adeptos de las sutilezas superfluas; ninguna mentira podría imponerse, de manera duradera, en las ciencias exactas. Pueden engañar algún tiempo a la comunidad científica (por ejemplo, “investigadores impacientes”), pero dependen en última instancia de sicopatología. La mentira simple, voluntaria, conscientemente empleada como medio de acción, es una práctica corriente en la esfera política, ya emane de los Estados, de los partidos, de los sindicatos, de las administraciones públicas o de otros centros de poder. La profanación de las palabras es uno de los recursos habituales, se llama una realidad con una expresión que quiere decir otra cosa, y el oyente o el lector inadvertido acepta la falsedad sin darse cuenta; o por cuestiones ideológicas, trata de no darse cuenta. Los persas de Herodoto pensaban que todo el mundo se equivoca menos ellos.

    En un magnifico artículo de Julián Marías, otro de mis grandes maestros, que lo titulaba “La verdad os hará libres” afirmaba que si cada mentira tuviera la respuesta fácil y elemental de su confrontación con los hechos, quedaría inmediatamente desvirtuada, sería inoperante y nada peligrosa. Pero no se hace sino muy excepcionalmente. Cada día en los períodicos, en los coloquios,... se pueden contar mentiras evidentes, flagrantes, a las cuales no se pone coto ni rectificación. El problema es que las mentiras se pueden ir acumulando. Y ocurre que la mentira es fácil de descubrir y mostrar, basta con enfrentarla  con la verdad, con decir lo que ha ocurrido y ocurre, con ver la tergiversación o la ocultación de la realidad. Hay personas que cuando abren la boca – salvo para ingerir alimentos – mienten sistemáticamente.

 

 

 

                                         Agustín Villanueva

                                         Profesor de Economía Aplicada de la UMH

 

                                                   2013 / 11 / 25