EL LIBERALISMO SOCIALISTA
El que fue asesor de ZP, espero que se reponga pronto, Miguel Sebastián, sostenía que el PSOE representa mejor que el PP (que manía con el PP , bueno que se lo digan a Rubalcaba y su brazo derecho, con la guerra de Irak, con el Prestigie, con el Gal, con Filesa, el Faisan, ….) los valores del liberalismo. Que el PSOE representa una visión liberal de la sociedad y de la economía. Dime algo Tocqueville, dime algo Hayek, dime algo Vargas Llosa, dime algo Rodríguez Braun,... por favor que me he quedado sin aliento. En la Verdad de Aquiles, Alfonso Reyes dice: Más si preguntas lo que yo aborrezco en una sola frase te lo ofrezco que recogí en los labios del Pelida: pensar y hablar dos cosas diferentes. Mira, Sebastián preocúpate de tu enfermedad, ya hemos tenido a Solbes, a mi paisana Elena Salgado, que eran unos fenómenos mintiendo, y no digamos a Rubalcaba, que el hombre se lo carga todo y eso que no ha estado nunca en los Gobiernos del PSOE.Olvídaros del liberalismo, sobre todo cuando gobernanaisteis, y gobernais, con la izquierda más radical y con los nacionalistas. Ahora no tenéis en frente a un gobierno liberal, sino un gobierno democratacristiano y socialdemocra, ¡vaya número!.
Todos somos liberales (hasta en Orihuela hay un grupo que se dicen de centro-liberal, y no son ni de centro ni liberales). La palabra de moda, en buena parte del mundo, es liberal, o su pariente pobre neoliberal; como dice Vargas Llosa, pasa con el liberalismo lo mismo que en los sesenta, con las palabras socialista y social, a los que todos se arrimaban, pues lejos de ellas, se sentían dinosaurios ideológicos. El resultado fue que como todos eran socialistas o, por lo menos, sociales – social demócratas, social cristianos, social progresistas- , aquellas palabras se cargaron de imprecisión Hoy se llama liberal hasta la política de China, y ,como dicen algunos, hasta el PSOE de ZP se decía liberal. Todos somos liberales, pues. Lo que equivale a decir, nadie es liberal. La libre elección, dice Vargas Llosa, está en la raíz del pensamiento liberal como manifestación de su liberalismo, de su cerrado rechazo del colectivismo (Rubalcaba., colectivismo)
De la defensa que se hace, frente a la pretensión ideológica de convertir a lo social en una instancia moral o política superior a la de los hombres y mujeres particulares, del individuo singular y de su soberanía – ese espacio autónomo para decidir sus actos y creencias- contra los abusos que pueda sufrir de parte de otros individuos o del Estado, monstruo abstracto al que el liberalismo identificó de manera premonitoria, desde el siglo XVIII como el gran enemigo potencial de la libertad humana al que era imperioso limitar para que no se convirtiera en un Moloch devorador de las energías del ciudadano. Indicaba Margaret Thacher que la sociedad no existe, existen hombres y mujeres individuales y existen también familias.
En opinión de la Izquierda, el liberalismo, en un sentido más moderno, (debe ser la mala interpretación del libro de Pettit) enlaza con el republicanismo (cari amici, ¿la habéis tomado con la rex pública, con la república) no sólo es el poder y derechos de los ciudadanos, sino también de la sociedad, que ejerce un control democrático de España. Pero amico, ¿España es una monarquía o una república? Y el remate final es cuando Sebastián aseguraba que Montilla era el ministro de industria más liberal que había existido. No me hagáis reír, que tengo el labio partido. Verdaderamente las cabezas no andan bien. Hayek, perdona, he interpretado mal tus libros, no me he enterado de nada. Vuelve Hayek, estoy echo un lió. Uno de Orihuela, esa vendita tierra, te diría, pero esto que é.
El liberalismo es una forma dogmática de pensamiento y la filosofía liberal es pluralista y cambiante, un sistema flexible que se perfecciona al compás de lo descubierto y lo vivido. Liberalismo quiere decir capitalismo y mercado y nada más; En verdad, quiere decir conciencia de la interdependencia entre política y economía, en el sentido de que no puede haber libertad política sin libertad económica. Hayek se ha referido a la trinidad inseparable de la civilización: la legalidad, la libertad. y la propiedad. Esos son los tres pilares que sostienen la filosofía liberal. La opción liberal es moderada en sus métodos y radical en sus metas. Como la propuesta liberal está en contra el colectivismo (no coletivismo, no conflito, no atitud, no “corruto” (bien Campeón), no reto,... y el estatismo, se le tilda de derechista. La opción liberal no es conservadora; como decía Revel en continentes modelados, a lo largo de decenios y tal vez siglos, por el estatismo, el dirigismo, el socialismo y el corporativismo, los liberales son reformadores y renovadores de los hábitos establecidos y las ideas recibidas y deberían ser llamados revolucionarios. El liberalismo se halla tan lejos del intervencionismo de marchamo progresista como del conservadurismo. El primero reprocha al liberalismo clásico ser una filosofía política conservadora en cuanto se opone a una filosofía de la historia que considera al estado como el realizador de la idea de progreso; el segundo reprocha al liberalismo, especialmente sus posiciones individualistas y antiestatalistas, el haber fomentado el proceso de decadencia y disolución de la comunidad política llamado Estado.
Lo que distingue al liberalismo de la tradición intelectual que se denomina republicanismo es su convicción de que el mejor régimen político no es el producto originado en un proceso comunitario de educación en la virtud, sino el resultado de un aumento de las posibilidades de opción individuales. En los curso. Jurgen B.Donges calificó la política de muchos gobiernos no solo de intervencionista, sino también de miope; cree que se están anteponiendo los intereses políticos al libre intercambio de capitales.
Agustin Villanueva
Profesor de Honorífico de la UMH
20012 / 04 / 27
6 comentarios
Pablo Cabellos -
Victoria Rodriguez -
Un abrazo
Victoria
Agostina Dopazo -
Así, el Dr. Carlos Acuña, Dr. Marcelo Leiras y Dr. Alberto Fohrig, profesores a quienes admiro sinceramente, accedieron a compartir sus impresiones y reflexiones sobre el tema. Llegado el momento de las preguntas, me animé a preguntarles acerca de la ideología. Ya que la oposición no supo organizarse de tal manera de poder generar un discurso y candidato fuertes para competir con el oficialismo, mi pregunta fue si la ideología cumplió o cumple un papel relevante en la política argentina. Me respondió Carlos Acuña, y su respuesta va de la mano con tus reflexiones en el artículo que leí. ¿Qué es izquierda y derecha hoy en día? Todos se hacen llamar liberales, todos son de izquierda, pero ya la esencia, lo que realmente ha sido llamado liberalismo o socialismo ha perdido su núcleo.¿ Ahora somos "pluralistas"?¿O no somos nada?
Mi impresión sobre este tema que señalás es que se está generalizando. En la política española, argentina, incluso estadounidense. El otro día leí un artículo sobre las elecciones primarias del partido Republicano. El candidato más popular era el que tenía propuestas más moderadas y desplazó al otro (que abandonó la contienda).
Claro que cada país tiene su historia política. Pero aún así, quizás el electorado busque propuestas moderadas y le escape a posiciones más radicales. Se me ocurre que podría ser el miedo a la "etiqueta" liberal, socialista, derecha, izquierda por las connotaciones positivas o negativas que pueda llegar a tener. Nadie quiere que lo encasillen en algún lugar del espectro político y por eso no presentan posturas políticas claras.¿Será este el nuevo juego que hay que jugar para ganar?
Gracias por enviarme tu artículo! Un placer haberlo leído.
Próximamente leeré los que me enviaste con anterioridad.
Besos!
Agostina.
Pablo Cabellos -
A.Presencia -
Francisco Brotons -